Ave y Guerra (鳥と戦争, Tori to sensō) es el nonagésimo octavo capítulo del manga Chainsaw Man y el primer capítulo de la Saga de la Academia.
Resumen[]
Asa Mitaka es una chica de secundaria que no parece encajar, mientras ve a sus compañeros de clase vivir vidas sin preocupaciones, salir con amigos, divertirse, y no puede evitar sentir resentimiento hacia ellos. Un día, su maestro, el Sr. Tanaka, trae a un Demonio Pollo llamado Quiquiriquín a la clase y dice que en tres meses, la clase lo matará y se lo comerá para enseñarles lo preciosa que es la vida. Quiquiriquín se convierte en una especie de mascota para los estudiantes y todos parecen amarlo, excepto Mitaka, quién se retira al techo de la escuela para almorzar cuando se le une la Presidenta de Clase; la presidenta nota la molestia de Mitaka con Quiquiriquín y le asegura que estará muerto en unos 100 días, por lo que no vale la pena preocuparse. Mitaka continúa hablando sobre cómo la ciudad en la que viven es corrupta y señala que hay un Demonio Motosierra jugando a ser cazador de demonios mientras hay problemas en la ciudad y, para empeorar las cosas, ahora hay un Demonio Pollo en su salón de clases.
A medida que pasan las semanas y los meses, Mitaka observa con molestia lo apegados que se vuelven sus compañeros de clase al Demonio Pollo; finalmente, tres meses después del día en que lo trajeron a clase, el Sr. Tanaka revela que Quiquiriquín en realidad no será asesinado ni comido, ya que todo esto fue una lección elaborada para enseñarles lo preciosa que es la vida, incluidas las vidas de los demonios, por lo que para celebrar el perdón de Quiquiriquín, la clase sale a jugar un partido de fútbol. Mitaka se une a ellos de mala gana, permaneciendo a un lado viendo jugar a los estudiantes en lugar de unirse a ellos, cuando Tanaka se le acerca y le pregunta por qué está sola, a lo que ella responde que va a la escuela a estudiar, no a hacer amigos. Ahí es cuando, de repente, Quiquiriquín salta a sus brazos y la llama por su nombre, siendo sorprendida, ya que nadie más que el maestro y la presidenta saben su nombre. En ese momento se da cuenta de que todo este tiempo ha odiado a todos en la escuela porque estaba celosa de ellos y no se dio cuenta de que solo quería ser como ellos; con Quiquiriquín inspirándole algo nuevo, decide finalmente unirse a sus compañeros de clase en el juego, cuando de repente se resbala y cae.
Cuando se levanta, mira horrorizada cuando descubre que accidentalmente aplastó a Quiquiriquín debajo de ella, exponiendo sus entrañas a toda la clase; la clase queda horrorizada mientras Mitaka vomita y se desmaya de la conmoción. Durante esa noche Mitaka se echa la culpa y piensa que la clase la odia por matar accidentalmente a Quiquiriquín. Mitaka llega a la escuela al día siguiente y siente las miradas de sus compañeros, juzgándola, por lo que regresa a casa completamente avergonzada, deseando morir. En medio de la noche, mientras se enfurruña en su cama, escucha el timbre de su puerta; afuera están Tanaka y la presidenta de clase, quienes han venido a acompañarla a la tumba de Quiquiriquín, diciéndole que el espíritu de Quiquiriquín podría perdonarlos si lo visitan.
En el camino, Tanaka y la presidenta cruzan la calle y Mitaka se queda atrás, pero la presidenta de la clase se da cuenta de que es porque Mitaka no cruzará la calle sin el semáforo verde y comienza a regañarla por ser una buena amiga. De repente, se transforma en un demonio hecho de músculos y revela que hizo un contrato con el Demonio de la Justicia, alegando que ella y el Sr. Tanaka habían estado teniendo relaciones, pero a él le gustaba Mitaka. Debido a esto, la única forma de que sean felices era matando a Mitaka, además de revelar que también que su plan era que Mitaka matara a Quiquiriquín para humillarla.
La presidenta transformada se abalanza sobre Mitaka con sus garras y, en sus últimos momentos, Mitaka está en paz sabiendo que no fue su culpa después de todo por matar a Quiquiriquín, y que tal vez si hubiera vivido una vida más egoísta, podría haber hecho amigos o incluso un novio; luego, la presidenta le abre la cara con las garras y la deja en el suelo con uno de sus globos oculares expuestos.
En ese momento, un demonio que toma la forma de un búho aparece sobre una farola y le dice a Mitaka que si quiere vivir, su cuerpo le pertenecerá; su cadáver de repente se reanima y se pone de pie, ahora afirmando ser el Demonio de la Guerra. Ella ataca a la presidenta transformada, convirtiendo la columna vertebral de Tanaka en una espada y el brazo de la presidenta en una granada, mostrando su habilidad para convertir objetos en armas de guerra, afirmando que esta batalla es solo su calentamiento y los destruye a ambos con la granada. Mientras se aleja de la explosión, ve un cartel en la pared con la cara del Hombre Motosierra, jurando encontrarlo y hacerlo vomitar armas nucleares nuevamente.
Personajes[]
- Quiquiriquín (Debut)(Muerte)
- Asa Mitaka (Debut)
- Tanaka (Debut)(Muerte)
- Presidenta de Clase con nombre desconocido (Debut)(Muerte)
- Demonio de la Justicia (Mencionado)
- Demonio de la Guerra (Debut)
Curiosidades[]
- El título de este capítulo, Ave y Guerra, recuerda el título del primer capítulo de la Parte 1, Perro y Motosierra.
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| Capítulos | 98 • 99 • 100 • 101 • 102 • 103 • 104 • 105 • 106 • 107 • 108 • 109 • 110 • 111 |
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